Somos una comunidad creativa dedicada a las artes vivas y al
desarrollo de proyectos culturales interdisciplinarios que
contemplan como eje central, el cuerpo. Está conformada por
artistas y gestores de México, Colombia y Chile. Como colectivo
fue fundado en el 2014 y desde el 2017, funciona de forma
simultánea como organización cultural.
El colectivo es un vehículo para la experimentación artística interdisciplinaria, la investigación del movimiento y la creación de dispositivos escénicos diversos que promuevan el pensamiento crítico y nos permitan congregar cuerpos para conmovernos y dudar. Desde el 2014 ha desarrollado proyectos de creación, investigación y difusión en colaboración con artistas latinoamericanos de distintas disciplinas; los resultados de esta labor creativa y pedagógica ha viajado por diversos espacios y festivales de México, Ecuador, Brasil, Bolivia, Paraguay, Uruguay, Chile, Argentina, Colombia, Panamá, El Salvador y Costa Rica.
En el 2018 enNingúnlugar A.C. llevó a cabo la primera edición del proyecto “.MOV, Foro de arte y cultura para repensar la migración”, y con este proyecto se buscaba algo que nos parecía urgente: hablar del fenómeno migratorio, llevarlo al espacio público para situarlo dentro de las conversaciones locales y nacionales.
En 2021, nos otorgaron la beca de la Convocatoria “Inclusión cultural y social de personas en movilidad” que realiza la Cooperación Alemana para el Desarrollo Sustentable GIZ en colaboración con el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), y con ella hicimos la segunda edición de este proyecto, donde contamos con distintos artistas nacionales y ahora también internacionales del Triángulo del Norte de Centroamérica.
Este año 2023, hemos sido invitados a participar en el Festival Internacional de Danza 4×4, que se llevó a cabo durante la primera semana de diciembre en la ciudad de Tijuana, Baja California.
La corriente verde en su edición 2024, busca explorar los territorios de los imaginarios colectivos que estigmatizan a lapersonas migrantes, investigando aquellos que prevalecen en las y los artistas escénicos de Querétaro, para sembrar, lejos de la inmediatez, distintas provocaciones en la búsqueda de que resuenen sobre los escenarios y posteriormente hagan eco en las conversaciones cotidianas del público general.
La corriente verde es una instalación performática que se despliega en el espacio público a manera de “happening” y se configura a partir del análisis de los conceptos migración, anómalia y comunidad enmarcados en los contextos latinoamericanos.
La corriente verde es una marea de cuerpos anónimos, cubiertos por un spandex, que organizan rituales y paisajes dentro de la ciudad, con la intención de visibilizar y desestabilizar las instrumentalizaciones a las que se suscriben l_s cuerp_s dentro del código social que regula aquello que entendemos como público, común y necesario.
Generar una propuesta escénica para el Festival Querétaro Experimental 2024 que involucre la participación de artistas locales, artistas migrantes y especialistas en temas de migración (GIZ, UAQ, COLEF, ACNUR, OIM) que buscan en conjunto, proponer una mirada distinta a la migración y a las personas migrantes, lejos de los estigmas y la discriminación cotidianos.
Crear una coreografía colaborativa de La corriente verde en el Festival Querétaro Experimental que involucre a 70 artistas escénicos locales y migrantes.
Tomarán un taller durante 4 días, alrededor de 4h por día, donde además se llevarán a cabo algunos conversatorios con especialistas en temas de cultura y migración de la mano de la UAQ, el COLEF, la GIZ México, el ACNUR y la OIM.
VERDE: relacionamos estos entes con los aliens palabra que en inglés
significa «extraterrestre» o «extranjero» , y es la etiqueta despectiva que suelen utilizar autoridades de EUA para referirse a las personas migrantes. También nos convoca hacia lo alienado, lo mutante, el código de los primeros ordenadores, la luz del semáforo que te invita a seguir, el símbolo de la naturaleza; la pantalla para efectos especiales, algo posible. Por ello, se convoca a la Corriente Verde, para imaginar y materializar otras formas de estar, para percibirnos a nosotrxs y a nuestros espacios, si es que cabe la distinción, como un código abierto, “hackeable”.
